Cáncer, la palabra tabú, la
estigmatizada como pocas, lo fue para mí, aún más, este 4 de febrero, el día Mundial
del Cáncer, cuando estábamos a la espera de recibir los resultados de las
pruebas médicas de mi padre. A pesar de tener mucho que decir, no hubo fuerzas
para publicarlo ese día.
Poco después comenzaron a
llegar a nuestras vidas las experiencias de personas que han pasado por esta
situación; parecía que venían acompañando al informe que traía el diagnóstico.
Los peores miedos se hacían realidad.
Ayer fueron 13 largas horas
entre quirófano y reanimación. Cansancio, vueltas a la cabeza y, a ratos,
cualquier conversación que sirviera de distracción fue toda la tarea del día.
Hoy, el informe del médico,
ha supuesto un soplo de aire fresco, y unido a una noche tranquila nos ha devuelto
un ápice de sonrisa interior.
La guerra acaba de
comenzar, pero haber ganado la primera batalla, es un buen comienzo.
a lo mejor no te sirve de nada pero una sonrisa es la mejor terapia para todos los acontecimientos de la vida y un diagnostico es solo eso, poner nombre a una enfermedad.El poner nombre sirve para reflexionar y pensar en lo tonto que somos y los grandes momentos que nos perdemos por tonterias. Tu padre con su cancer nos dice a todos que cada dia es nuevo y lo del anterior ya ha pasado.
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