Pero como estas fechas son calentitas, fiscalmente
hablando, los plazos continúan.
El 21 de julio es la fecha tope para presentar la
autoliquidación del segundo trimestre de IVA de este año, así como las
retenciones a cuenta o pagos fraccionados del IRPF.
Por si eso no fuera o fuese suficiente, el día 25 de
julio finaliza también el plazo del Impuesto sobre Sociedades.
Vamos, que las gestorías y semejantes están en estas
fechas como para soplarles la oreja.
Como siempre suele suceder, hay otros impuestos,
algo menos comunes, que también amenizan estos días. Para ellos, os dejo un
recordatorio del enlace al “Calendario del Contribuyente” de este año, al que podéis
acceder haciendo clic en el enlace.
Y por si a alguien se le estuviese pasando por la
cabeza hacer alguna trampa, ya está la Agencia Tributaria en campaña de choque
con los anuncios en los que unos ciudadanos, ejemplares todos ellos, te dicen
que todo lo que defraudes tú lo pagamos entre todos. Estaría bien que se
aplicaran el cuento quienes se lo tienen que aplicar, que puestos a aportar,
unos lo hacemos con granitos de arena y otros se llevan montañas y montañas. Un
poco desequilibrada anda la cosa.
En fin, solo puedo desearos una Feliz Contribución.