jueves, 2 de enero de 2014

NUEVOS PROPÓSITOS, ESTRATEGIAS Y BRINDIS

Comenzamos el año entre uvas que querían escaparse, risas y carcajadas. Hubo un momento en que las lágrimas provocaban más risas todavía. No es mal comienzo. Mejor lágrimas de risas que no de llanto. El pequeño de la casa sí lloraba, pero de puro nervio y emoción y no hay problemas, porque con sus siete años, ya ha conseguido convertir ese llanto en tradición familiar.
La alegría ha durado casi un par de días, el tiempo que he tardado en ver un telediario. No es por ser pesimista, pero a pesar de las risas  y los buenos propósitos iniciales, esto pinta cada vez peor. Mas y su independencia, el aborto, atentados en Beirut, el conflicto en Siria, la economía que dicen que suben, pero que los ciudadanos notan que baja… y un sinfín más de situaciones que a mí me parecen aterradoras y que cada vez más, y supongo que debido a mi edad, me producen auténtico pavor y se me asemeja al preludio de algo peor.
Pero como no hay que ser alarmistas, prefiero quedarme con los brindis que ayer unos amigos y yo hacíamos por cada uno de nuestros nuevos propósitos para este año. Al principio, prudencia, como siempre, pero la cosa se fue animando y menos mal que eran brindis sin alcohol, porque sino la cogorza podría haber sido buena.
Ahora, una vez tenemos claros los objetivos, que cada unos establezca su estrategia y a por todos, no nos vaya a pasar como a algunos, que enviaban mensajes diciendo que este año querían cumplir los objetivos del 2013 que deberían haber cumplido en el 2012, que prometieron en 2011 y estaban planificados para el 2010.
Eso sí, a objetivo cumplido, brindis al canto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario