Algo así es lo que viene a decir el artículo que
hace unos días leí y del que os dejo el enlace.
"El tiempo libre ha muerto"
"El tiempo libre ha muerto"
No tenemos tiempo para nada y yo, sin saberlo he
sido seguidora de esa tendencia. Por alguna extraña razón y por mi habilidad
para meterme y que me metan en líos, habitualmente no tengo tiempo ni para
rascarme la cabeza. No creo que eso sea estatus, ni para mí, ni para nadie, pero
sea como fuere, yo no lo quiero.
Como lo americano me llama poco y en general no soy
muy de tendencias, creo que ha llegado el momento de darle prioridad a ese
tiempo que tantas veces he ansiado para mí: mi tiempo de ocio, mi tiempo libre,
mi tiempo de disfrute.
¿Habrá excepciones? Por supuesto, pero serán eso,
excepciones, y no la norma.
De momento lo he puesto en práctica esta Semana Santa y ha funcionado. Mi tiempo libre agonizaba, pero sobrevivirá.
Querido Tom, por una vez, y sin que sirva de precedente, la razón es tuya.
De momento lo he puesto en práctica esta Semana Santa y ha funcionado. Mi tiempo libre agonizaba, pero sobrevivirá.
Querido Tom, por una vez, y sin que sirva de precedente, la razón es tuya.
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