Hoy es uno de noviembre, Fiesta Nacional de Todos
los Santos.
Al pasar por la puerta del cementerio, ayer por la
tarde, el aparcamiento estaba a rebosar de coches y el interior que se veía
desde la puerta, mostraba un ir y venir de gente que realizaba las tareas
propias de la fecha. Mi mente, mientras tanto, realizaba un repaso mental, como
si pasara lista para que no se me olvidara nadie. Fue fácil, porque los llevo
conmigo y los voy recordando en el día a día, según las circunstancias y el
momento; a veces por un pensamiento, otras veces por una palabra o una frase y
otras por un sentimiento o una sensación.
Hoy este camposanto lucirá sus mejores galas.
Lápidas limpérrimas, flores frescas y visitas previas al día de campo que el
parte meteorológico ha marcado como bueno.
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