miércoles, 13 de noviembre de 2013

COSAS DIFUMINADAS

Ayer fui al oculista. Tenía que graduarme la vista. No veo bien, me cuesta enfocar y ver las cosas con claridad.
El médico, tras someterme a varias pruebas y dilatarme la pupila para ver mi fondo de ojos, me dio su diagnóstico: “No se preocupe, está usted bien. No tiene ningún problema. Es más, puede dejar de usar las gafas que usa, porque no es que usted no vea las cosas claras, sino que las cosas están así, como difuminadas.”
Nunca lo habría definido así, pero después de mirar a mi alrededor, con y sin gafas, fue así como las vi, y me pareció una calificación bastante adecuada.
Supongo que tener las pupilas totalmente dilatadas me ayudó a verlas así, sin embargo, al levantarme esta mañana, con las pupilas en perfecto estado, el panorama no ha mejorado en absoluto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario