jueves, 31 de enero de 2013

LA ESPADA DE DAMOCLES


Llego a la oficina y el tema de hoy es de total actualidad. Despidos.
Ayer, mientras yo viajaba para terminar de realizar mis actividades del día, el revuelo se apoderaba del ambiente. Al parecer se comunicó otro despido.
Ignoro el motivo causante y desde luego no voy a entrar en inútiles especulaciones, pero sí en el ambiente que día a día se respira como consecuencia del temor inculcado a que uno mismo pueda ser el siguiente.
Desde hace tiempo intento no participar en conversaciones relacionadas con este asunto, pues parece ser que mi opinión (que entiendo debería ser tan respetable como cualquier otra) dista mucho de la general, lo que suele crear controversias y discusiones improductivas.
Por mi propia trayectoria profesional aprendí a mirar de frente a esa “espada de Damocles”, a la que todo el mundo teme y que se cierne sobre nuestras cabezas.
Esa postura me permite ver el pelo de crin de caballo que, según la leyenda, la sujeta para poder reaccionar a tiempo y apartarme si fuera necesario, aunque no siempre sea posible.
Si bien es verdad, que la historia cuenta que amenazaba a aquellos que ostentaban poder, hoy día es menos selectiva con aquellos sobre los que puede caer y a menudo son ejecutados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario